1. Picamos el puerro y la cebolla. Lo rehogamos con un pelín de aceite, a fuego bajito para que no se queme.
2. Mientras, pelamos la calabaza, le quitamos las pipas y la troceamos.
3. Una vez estén el puerro y la cebolla pochaditos, sin llegar a dorarse, añadimos los trozos de espinacas. Yo hoy he utilizado congeladas y las he puesto tal cual a rehogar, durante unos 5 minutos aproximadamente.
4. Incorporamos la calabaza y la rehogamos un par de minutos más.
5. Añadimos un poco de agua (sin llegar a cubrirlo), sal, un poco de jengibre rallado y dejamos que hierva a fuego medio unos 15 minutos, o hasta que esté blandito.
6. Ya sólo nos falta añadirle los 2 o 3 quesitos y batirlo bien con la batidora.Probarlo por si debéis rectificar de sal y ya tenemos otra cremita rica y sana para disfrutar.
Nota: Se puede tomar fría o caliente. A mi me gusta casi más de templada a fría, incluso en invierno.
El Proceso:
¡Qué buena idea lo del jengibre! Y otra foto chulísima. Has empezado el año con fuerza eh? Estupendo porque así nos la transmites a los demás.
Un beso
Gracias Espe. Pruébala, te gustará.
Este año va a ser muy bueno así que hay que aprovecharlo.
Un beso y mucha energía!