Tengo el placer de presentaros a las protagonistas de hoy, las autenticas reinonas del campo.
Tras un invierno complicado, en el que las gallinas,tristonas , apenas ponían huevos, llega el calorcito – aunque sigue haciéndose de rogar- los días más largos y la producción empieza a ser cada vez más grande.
En mi opinión, ésta es la mejor época para comer huevos de campo. La luz y el calor nos proporcionan cantidad, pero son las hierbecitas verdes que picotean, las que hacen que tengan esa yema de color anaranjado. No se por qué se empeñan en limitar este manjar a 3 unidades semanales, cuando es una fuente de proteínas fantástica y absolutamente deliciosa.
Y los huevos de dos yemas, ¿cómo son de buenos? Parece que están hechos para que podamos mojar sopones, o más patatas, eso va en gustos. Este año hay alguna gallina que pone las yemas de dos en dos y dentro del mismo huevo. 😉 .
Recuerdo de pequeña, creo que desde entonces no los tomaba, que cuando te tocaba uno, te sentías tremendamente afortunada y especial, como si dieran suerte. Pues lo peor, es que de mayor, me sigo sintiendo igual. Y es que hay cosas que nunca cambian.
Entre los huevos de esta mañana, había uno que doblaba el tamaño normal. Podéis verlo vosotros mismos en la foto , porque yo, a pesar de ser andaluza, no exagero. 😉
Este me lo reservo para hacerlo frito esta semana. Si tenéis oportunidad de comer huevos de campo, ni lo dudéis. Considero que algo tan simple como un huevo frito, es uno de los manjares tan exquisitos.
Por eso nosotros seguiremos mimando mucho a las gallinas, pensamos que así serán más felices y los huevos estarán mejor. 😛
Por dios que cosa más rica!
Siiiii. Rica rica de verdad!!
Que envidia!!! ojala pudiera tener gallinas en casa, pero seguro que a mis gatos no les haría mucha gracia….
Tiene que ser una gozada tener huevos frescos siempre que quieras y encima el sabor no tiene nada que ver con los del super
Que maravilla de imágenes, nos encanta esta producción de huevos. Nosotros también disponemos de acceso a esta maravilla de la naturaleza, gallinas que viven totalmente en libertad y que disfrutan correteando por el campo y picoteando toda la hierba. Todas nuestras recetas son elaboradas con este ingrediente y os podemos asegurar que la felicidad de la gallina se nota en el plato
Muchas gracias Asun. Maravilla las recetas que acabo de ver en tu blog. Si es cierto que las gallinas felices te hacen requetefeliz, cuando saboreas sus huevos en el plato. Es casi un agradecimiento por haberles permitido vivir en libertad.