Hay dos hechos que considero casi un preludio de lo que terminaría siendo mi vida “De Campo”: Los melocotones (los de Tía Lou) y las calabazas.
Como es tiempo de Halloween y ayer recogimos las penúltimas, hoy hablaremos de calabazas.
Un día, al poco de comenzar un periodo sabático que me regalé tras un intenso proyecto, cociné algo con calabaza. Sola, haciéndome con esa nueva vida de calma y reflexión, vi las pipas y pensé (aunque me pueda avergonzar reconocerlo): ¿de esta pipa podría salir una planta?¿podría cultivar calabazas en mi jardín?. Mi jardín es, o era antes de mudarme, de un metro cuadrado, no mucho más. Recordaba los garbanzos y las lentejas, esos que en el cole arropábamos con un algodón que chorreaba por toda la casa. Experimento que finalmente hacía brotar algo verde, pero que no solía llegar más allá, al menos en mi caso. Pues lo que comenzó siendo un plantoncito de calabaza precioso, termino invadiendo mi jardín. No sé si la conocéis, pero la planta de calabaza consigue que broten unas flores amarillas preciosas y enormes, con relativa rapidez. Ahora que ha pasado el tiempo, veo todo aquello como una señal, un primer contacto con lo que tiempo más tarde terminaría siendo mi nueva forma de vivir.
Pasar una tarde de campo es ahora mi rutina. Como casi en toda España han llegado las lluvias que tanto nos hicieron sufrir el año pasado, esas que no llegaron. Tras un año de sequía, ver cómo se nutre la tierra con los benditos 45 litros que han caído, es muy emocionante. Entre los olores y la tranquilidad que trasmite el campo reposando tras la lluvia, recogimos las últimas calabazas del huerto. Además de bonitas, son nuestra reserva de vitaminas que nos aseguraran beta-caroteno durante todo el invierno, hasta la próxima cosecha.
Os dejo unas fotitos para que disfrutéis con lo caprichoso de la naturaleza. A ver quién es capaz de elegir una, sólo una de las maravillas que os muestro.
La galería:
Yo tengo mucha suerte! Me volví de allí con una enorme en el coche…
Ya estoy viendo recetas para aprovecharla al máximo. Lo que pasa es que me da pena abrirla!… es TAN bonita!
Está en la cocina, enorme, pesada, como con historia. Ahí en medio haciéndose la dueña de la cocina… cualquiera se acerca con un cuchillo!
Suerte la nuestra de tenerte como amiga.;-)
Queremos fotos de tooodo lo que vayas preparando con la supercalabaza. Creo que esto va a ser divertido.
Reblogueó esto en Cosas que nos hacen disfrutary comentado:
He leído lo que publiqué hace ahora un año y casi me sonrojo. Qué lejos veo todo y qué rápido pasa la vida… qué de instantes disfrutados desde entonces.
Tiempo de calabazas, eso nos ocupa. Y aunque la cosecha de calabazas de este año no ha sido muy buena, la del año pasado fue tan excepcional, que quizás tengamos para todo el invierno. No he tenido ni tiempo para hacer foticos, pero si os gustan las calabazas, seguro que os gustará recordar estas imágenes.
Muy bonita reflexión Lulú. Me alegro que sigas disfrutando incluso más ahora de tu nueva forma de vida. Enhorabuena por el primer año en la blogosfera. Que cumplas muchos más.
El otro día compré una calabaza de esas que venden en la Fruteria especial para Halloween y tu sobrino Pablo , extrañado me dijo:» mamá, pero si Tía Lú y Nono seguro que nos iban a traer una calabaza pequeñita de Halloween que además es mucho más sana que la de la frutería»…
Vamos, que ya saben que todo lo de campo de verdad es mejor. Gracias por vuestra aportación. Para mi es muy importante que crezcan sabiendo lo que es una buena alimentación y ahí ponéis vuestro granito de arena.
Un beso de todos
Se me acaba de caer un lagrimón! Qué lindo es Pabloncho. Sin duda uno de los que más conciencia «de campo» tiene, eso me dice siempre el profe de campo 😉 .
Muchas gracias a ti querida Espe seguiremos enseñando lo que podamos. Sólo espero haber aportado ese recuerdo que tendrán, cuando sean capaces de reconocer el olor a tierra, a tomate, a salud y a paz, la paz que nos da el campo y que a veces no nos paramos a disfrutar.
Uyy, qué profundo me ha salido no? Bueno, sólo añadirte que tenemos las habas preparadas para hacer un taller el próximo día que vayamos.
Un besito.
Tia Lou.