No termino de acostumbrarme a estas instantáneas. Ésta me sorprendió en algún rincón perdido de la marisma sanluqueña. No se a vosotros, pero a mi me trasmite paz, sencillez.
La gente recorre los campos, para segar el pasto y así alimentar a sus caballos. Van despacio y eso les permite recordar qué es lo realmente importante. Ésta, sin duda, es otra forma de vivir, donde lo importante no es correr, lo que importa es precisamente eso, vivir.
La gente recorre los campos, para segar el pasto y así alimentar a sus caballos. Van despacio y eso les permite recordar qué es lo realmente importante. Ésta, sin duda, es otra forma de vivir, donde lo importante no es correr, lo que importa es precisamente eso, vivir.
Jo, tía, Debo, que bonito. Yo también quiero un borrico. Lo demás ya lo tengo: un(a) compinche, los AMIGOS y la ausencia de prisas.
Besos maja.
Y lo más importante, la conciencia de lo realmente importante. 🙂
Tienes un bitacora preciosa aqui. Adelante.
No sabes cuánto te lo agradezco.
Lo hacemos con mucho cariño, la verdad es esa. Me encanta tu nombre, Marina…. Un placer, tenerte por aquí.
Gracias de veras.
gracias marina, a ti si que se te da bien criar tomates. Ya he visto tus platenses, romas , amarillos y corazon de buey. un saludo.
Yo te sigo, claro! a ti tambien de maravillas!. Saludito cordial.Marina.