Rape con patatas, puerro y azafrán, una receta marinera al más puro estilo tradicional
Lo normal es que cuando me pongo a cocinar no tenga claro el resultado final hasta que lo termino. Eso es lo más habitual, pero hoy ha sido distinto. He ido a la plaza a por unos filetes de marrajo que se nos habían antojado, pero me encontré con un rape mirándome con carita de » llévame a casa» como Rodolfo el Langostino ¿os acordáis? pues igual. Rafael, el pescadero muy amable y apañao me lo preparó . «¿Qué le hacemos? » me preguntó. Y yo con carita de haba le dije que me sacara los lomos y me guardara la espina. No tenía claro cómo lo iba a preparar.
Cuando me limpian el pescado en la plaza, me quedo hipnotizada mirando al bicho y al profesional, porque manejan los cuchillos como nadie. Al verlo siempre parece que es sencillísimo, pero luego llegas a casa y lo haces tú nos case «casi» igual 😀
¿No os pasa que cuando os veis con algún buen producto inesperado entre las manos os ponéis tan contentos que no podéis ni pensar? Pues a mi me pasa, siempre me pasa… y como tenga hambre no os quiero ni contar 🙂 Nada como servirte una copita de amontillao ( que para algo estamos en Sanlúcar) para ir pensando cómo atacar. Sencillo y delicado, con mucho protagonismo del rape y eso hice. Visualicé un plato suave pero intenso y elegante, Una receta sanluqueña, una receta marinera al más puro estilo tradicional.
Es fantástica y muy sencilla de preparar. Llevábamos unos días con comidas muy especiadas y picantes y este plato nos hizo recuperar el delicioso sabor a mar. Muy interesante, hacerme caso, no la dejéis de probar.
Ingredientes:
- Los huesos del rape y un lomo limpio ya ( el otro ya os contaré cómo lo hice )
- 3 Puerros ecologicos
- 3 patatas de Sanlúcar o alguna buena variedad para guisar.
- 2 dientes de ajo
- 1/2copita de Amontillao
- Unos hilos de Azafrán
- Un pimiento confitado sin piel ni pepitas ( yo utilicé un ají de canca que tenía, de picor moderado que sin las pepitas y con la papa da más color que picor. Podéis utilizar 1/4 de pimiento seco rehidratado o añadir al sofrito un trozo de rojo de asar.
- Aceite de oliva virgen extra
- Pimienta negra recién molida
- Sal
Cómo lo preparamos:
- Enjuagamos el rape y los huesos ya troceados con agua fría y dejamos escurrir bien.
- Limpiamos los puerros y picamos en aritos no muy grandes junto con 2 dientes de ajo. Así lo tenemos listo antes de empezar.
- Con las patatas igual, las pelamos y tronchamos en trozos no muy grandotes y las dejamos que esperen su turno.
- Sacamos la carne del pimiento seco o como en mi caso chile confitado. Retiramos la piel y las semillas y reservamos también.
- Secamos el lomo y lo troceamos en medallones de 1-2 cm de grosor. Los huesos deben estar ya cortados.
- En una cacerola ponemos un chorreón de aceite, mientras se calienta salpimentamos el rape. Cuando ha cogido calor, doramos un par de minutos el rape. Los medallones los sacamos casi enseguida – un minutillo, no más – y los huesos los dejamos que se hagan un poco más. Sacamos y reservamos.
- En ese mismo aceite sofreímos a fuego medio los dientes de ajo y los puerros hasta que se comience a coger color sin llegar a dorar.
- En ese momento, añadimos la carne del pimiento y unos hilitos de azafrán. Rehogamos un pelín más todo junto y cuando empiece a dorarse algo más, añadimos las patatas, los huesos de rape y removemos bien para evitar que se pegue. Un par de vueltas de cuchara y el chorreón final. ¿Preparados para oler a gloria? Pues copita de amontillado para desglasar y recuperar así toda la esencia a campo y a mar.
- Sólo nos queda añadir el agua hasta cubrir y dejarlo a rimo chop chop hasta que la patata se haga con los trozos de hueso de rape, Deberéis añadir algo de sal y poco más.
- Una vez que la patata está tierna, probamos y rectificamos de sal.
- En este punto lo que hice fue parar la cocción. Saqué los huesos y recuperé la carne de rape que podía quedar.
- A la hora de comer, calentamos las patatas nada más y dos mitutos antes de servir añadimos los medallones de rape y lo poco que hayamos podido recuperar de los huesos. De esta forma el pescado no se pasa y se queda en su punto.
- Lo de limpiar los huesos es pura comodidad, rape «al Señorito» debería de haber llamado a esta receta , pero lo de Receta marinera de Rape con patatas, puerros y azafrán, me gustaba más 😉